
Juego a la ronda con unos veinte niños más; el sol brilla sobre la pradera; la mañana es primaveral y el viento sopla lo necesario como para que los barriletes cubran el cielo; se escucha a los pájaros y el murmullo del arroyo mezclarse con nuestras risas. Veo otros tantos niños corriendo y andando en bicicletas; un grupo de niñas corre mariposas en una lomada cubierta de lavandas; padres y abuelos juegan felices con hijos y nietos.
Mi padre está conmigo, me abraza tiernamente, su sonrisa me da toda la seguridad del mundo, pero eso no es todo; desde su camioneta salta un hermoso “golden retriever”; mi regalo de cumpleaños.
-Dígame doctor –dijo uno de los médicos que lo observaban -¿no hay manera de tener aunque se a una idea de lo que puede estar pasando por su mente?
-La droga es experimental, pero a juzgar por su actividad cerebral está inmerso en una fantasía placentera que reemplazará su memoria de largo plazo –respondió el médico con una sonrisa y agregó. –por lo que sabemos de la historia del recluso, su padre lo sometía a constantes abusos, que sumado a una niñez solitaria y llena de privaciones lo convirtieron finalmente en un infanticida serial. –guardaron silencio por un momento observándolo acostado en aquella cama entre muchas otras camas y quien hablaba agregó –quizá si cambiamos su pasado transformemos su futuro. –y se alejaron hasta perderse de vista del prisionero 272.
Mi padre está conmigo, me abraza tiernamente, su sonrisa me da toda la seguridad del mundo, pero eso no es todo; desde su camioneta salta un hermoso “golden retriever”; mi regalo de cumpleaños.
-Dígame doctor –dijo uno de los médicos que lo observaban -¿no hay manera de tener aunque se a una idea de lo que puede estar pasando por su mente?
-La droga es experimental, pero a juzgar por su actividad cerebral está inmerso en una fantasía placentera que reemplazará su memoria de largo plazo –respondió el médico con una sonrisa y agregó. –por lo que sabemos de la historia del recluso, su padre lo sometía a constantes abusos, que sumado a una niñez solitaria y llena de privaciones lo convirtieron finalmente en un infanticida serial. –guardaron silencio por un momento observándolo acostado en aquella cama entre muchas otras camas y quien hablaba agregó –quizá si cambiamos su pasado transformemos su futuro. –y se alejaron hasta perderse de vista del prisionero 272.